domingo, 12 de abril de 2009

INFORME 2: GESTIÓN DE LA CANTIDAD DE INFORMACIÓN

INFORME SOBRE LA GESTIÓN DE LA CANTIDAD DE INFORMACIÓN
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Para iniciar este segundo informe es importante aclarar algunos conceptos que dan explicación a la gestión en la cantidad de la información.

Folcsonomía[1]: según wikipedía, “es una indexación social, es decir, la clasificación colaborativa por medio de etiquetas simples en un espacio de nombres llano, sin jerarquías ni relaciones de parentesco predeterminadas. Se trata de una práctica que se produce en entornos de software social cuyos mejores exponentes son los sitios compartidos como delicious (enlaces favoritos),Flickr (fotos), Tagzania (lugares), flof (lugares) o 43 things (deseos)”. En otras palabras es una metodología de recuperación de información de internet que consiste en etiquetas abiertas, generadas de forma colaborativa, que clasifican contenidos como páginas web, fotografías online y vínculos web. Los autores del sistema de etiquetado son con frecuencia los principales usuarios del contenido al que se aplican las etiquetas. Las etiquetas suelen conocerse con el término tags. Las folksonomias también son interesantes desde el punto de vista de la organización personal de datos, si se echa un vistazo a del.icio.us hay muchas páginas clasificadas con la etiqueta to read (para leer), denotando que esas personas consultaran el servicio en un futuro a modo de agenda para ver que leer.

Flickr[2]: es un sitio y paquete de servicios web para compartir fotos, y una plataforma de comunidad online que se considera, generalmente, como uno de los primeros ejemplos de aplicación de Web 2.0, la nueva fase de desarrollo de internet. En flickr así mismo hay muchos fenómenos curiosos como son el tag me (yo) con fotos personales de los usuarios o relaciones que se crean a modo de historias en las que un usuario comienza un tag y otros lo continúan como fliktion empezado por Andrew Lowosky, con pequeñas historias en los comentarios de las fotos de timbres del mundo y que los usuarios han continuado.

El elevado y creciente número de weblogs, fotologs y podcasts ha acentuado uno de los grandes problemas de la red: la gestión del conocimiento. Son más de 30 millones los weblogs indexados por Technorati, más de 4 millones de fotografías alojadas en Flickr y el número de podcast y videocast está en permanente crecimiento. Gestionar de forma efectiva toda esta información supone un reto, y tanto las Foklsonomías como la Web Semántica son dos herramientas que tienen esto como objeto.

El OCS es una estructura organizativa utilizada para realizar el seguimiento y análisis comparativo de procesos y programas, así como su incidencia en las comunidades en que se desarrolla, posibilitando además el conocimiento e intercambio de experiencias para profundizar, como se afirma en el primer informe, en los asuntos cibersociales. La folksonomía en el OCS es un sistema de clasificación inductivo. El valor de esta organización reside en que los usuarios dejan de ser meros consumidores de páginas Webs estáticas creadas por un autor o editor, para convertirse ellos mismos en los creadores de contenido. Esta tarea se facilita enormemente gracias a la proliferación de herramientas gratuitas que permiten a los usuarios crear contenido mediante la publicación de artículos, publicar imágenes en Flickr o vídeo en YouTube.

La OCS se suma a los pasos de las nuevas tecnologías para conseguir una página más amena, participativa y atractiva para los usuarios. Aplica la tecnología 2.0, con herramientas diseñadas para que los usuarios interactúen y retroalimenten el sistema. A través de esta tecnología, el usuario puede recibir, gestionar, crear y difundir información de la organización con facilidad. La OCS proporciona un espacio on-line para almacenar, clasificar y publicar/difundir contenidos textuales y audiovisuales, a los que sus usuarios remotos pueden acceder. Al ser un sitio ágil y fácil de localizar la información fomenta la interacción del usuario con el sistema. Además simplifica la usabilidad de la Web ahorrando tiempo al usuario. Y sobre todo, consigue estimular a los usuarios acostumbrados a navegar en un entorno Web 2.0.

En el segundo y tercer congreso, la OCS, organizó grandes bloques temáticos, en los que se desarrollaron diferentes foros y plenarias en grupos de trabajos con temáticas más específicas. Los artículos publicados en la sección divulgación OCS son una contribución colaborativa voluntaria al Observatorio para la CiberSociedad, como lo afirma la misma organización. La responsabilidad de las afirmaciones, opiniones y contenidos expuestos en los artículos recaen en los autores y permiten proliferación de conocimientos. Las folksonomías usadas en estos congresos actuaron como sistema de clasificación de conocimiento sin jerarquía, descentralizado, donde la capacidad y la responsabilidad de la clasificación recayeron en algunos casos en el autor del contenido, pero sobre todo en los usuarios. De ahí, que el Observatorio para la CiberSociedad permita la reproducción de esos contenidos siempre y cuando se cite correctamente la fuente de procedencia y el autor/-a haya sido informado de ello y lo haya aceptado previamente y de modo expreso.

En su artículo[3], “Folsonomías: sistemas emergentes de gestión del conocimiento”, Fernando Garrido Ferradanes nos explica la diferencia entre las folsonomías amplias y las estrechas: “El ejemplo que mejor ilustra la Folksonomía amplia es del.icio.us, donde los usuarios clasifican por tags algunos de los sitios webs que visitan y de los que no son creadores. Así, una sola persona, el creador de contenido, o un reducido número de usuarios aplican sus tags al contenido. También es diferente el fin y los usos entre ambas folksonomías, así, en la estrecha, las tags están asociadas directamente con el objeto y es muy complicado saber cómo están siendo utilizadas, incluso cómo lo están denominando y apropiando los usuarios, ya que parten de una conceptualización ya predeterminada, con lo que no es posible generar vocabulario o descripciones emergentes. Flickr, la herramienta de gestionar y compartir fotografías, es el mejor ejemplo en este caso. Cuando un usuario sube un archivo a la red puede añadirle una(s) tag(s) e incluso añadir alguna a las fotografías de las personas que lo han habilitado como “amigo”, pero en ningún caso puede añadir tags a cualquier fotografía”. En el OCS, hay una folksonomía estrecha pues son los autores quienes taggean sus creaciones, como se observa en los diferentes artículos y aportes que hacen al congreso. Es importante agregar que al utilizar una folcsonomía compartida, las personas que buscan sitios en su propio idioma podrán ponerse en contacto indirecto con personas de gustos o intereses parecidos, lo cual les da la posibilidad de encontrar sitios en sus propios idiomas. Periodistas, profesionales, bloggers, artistas online, y en general, cualquier persona interesada en conocer qué está sucediendo en el mundo de los contenidos sobre la ciberesociedad, pudo y puede participar en los congresos de la OCS (El próximo IV congreso se realizará en este año 2009) gracias a su construcción en red. El OCS resuelve la gestión de la cantidad de información usando este tipo de folksonomías, que como ya lo dije antes, permiten mostrar información de manera organizada de acuerdo con las necesidades de los usuarios.
REFERENCIAS

[1] http://es.wikipedia.org/wiki/Folcsonom%C3%ADa
[2] http://es.wikipedia.org/wiki/Flickr
[3]http://www.cibersociedad.net/recursos/art_div.php?id=94

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